Lima

Pasamos casi 2 semanas en Lima, recorriéndola de la lado a lado y viviendo su espíritu. Nos sorprendió mucho la infraestructura vial que tiene, con grandes avenidas, puentes y túneles para movilizar la  gran cantidad de automóviles. La ciudad es muy limpia, organizada, pavimentada y la verdad muy hermosa. Los peruanos dicen que Lima cuenta con una gracia especial, porque es la única capital de América del Sur que se encuentra frente al  mar, por lo que goza a su vez de esa sabrosura de los costeños. Apenas nos bajamos del bus, cogimos un taxi y nos dirigimos hacia el Distrito de Miraflores, uno de los más reconocidos por ser cuna de famosos y lujosos restaurantes, lindos parques, miradores y centros comerciales. Ahí, nos alojamos en el Kokopelli, un hostal muy chévere para "backpackers", donde pasamos 2 días. De Miraflores tengo que decir que es una zona muy linda, muy tranquila en el día, la gente va al parque Kenedy a pasar la tarde y en la noche se prende la rumba. Lo único como jarto, y en general pasa por todo Lima, es el ruido de los pitos de los carros, buses, taxis, etc. Los conductores pitan porque sí y porque no. Pitan para que el señor de adelante arranque, pitan para saludar al busetero del lado, pitan para llamar la atención de los peatones, pitan porque ven que llevas una maleta y de pronto necesitas un taxi, pitan por todo. Entonces es bien raro, uno ir caminando por la calle con la maleta, y que cada 5 segundos algún señor taxista te esté pitando a ver si te quieres montar al carro o no. Ahora, las municipalidades de los distritos están realizando campañas en contra de "ruidos molestos" y en los postes de luz hay carteles que dicen "este espacio es 100% sin ruido", aunque sea mentira, por lo menos ahora son consientes de la contaminación auditiva que se vive por toda la ciudad.

 Luego, nos cambiamos de hostal y nos fuimos para el Distrito de Barranco, lugar donde muchos escritores, músicos y artistas peruanos vivían, y formaron en la zona el punto bohemio de la ciudad. Barranco es muy famoso por su Museo de la Electricidad, que tiene entrada gratis porque realmente quien carajos va a pagar para  ver cables. Por otro lado, está la "Bajada de baños", una callesita peatonal en bajada, que da acceso a la playa. Este paseo es hermoso, porque vas pasando por pequeñas casonas antiguas que ahora son cafés o restaurantes, y llegas de pronto a un mirador divino, donde puedes en un día excepcional mirar la costa limeña, si la bruma te deja claro. En Barranco, pasamos 9 días, recorrimos sus calles y conocimos el mejor restaurante vegetariano buffet que queda al lado de la municipalidad en un antiguo vagón de tren. Fantástica la comida!! Super recomendado.

 Un día estuvimos visitando el centro histórico. En una sola palabra: espectacular. La Plaza de Armas, donde se encuentra el Palacio de Gobierno y la Catedral, está adornada por pequeños jardines de flores amarillas y rojas, con una fuente en el centro que da frescura al ambiente e invita a sus peatones a pasar una tarde tranquila. Algo que nos gustó mucho de Lima, y sobre todo del centro, es que tiene muchos parques. Ahí, uno ve a la gente pasar la tarde, hay mercados artesanales, cuenteros, venta de comidas, etc. Nos parece muy importante que una ciudad tenga ese tipo de espacios para las personas, donde el encuentro de unos con los otros forma la ciudadanía.

 En el centro, estuvimos comiendo en un restaurante típico, donde probamos el pisco sour, la papa a la huancaína y los tequeños, unos palitos de queso con guacamole, deliciosos!! Aqui les dejamos una foto para el antojo! También, la chicha morada, un refresco muy rico que lo venden por todo lado y es la bebida más barata del Perú.

Estuvimos también, en el distrito de Surco. Ahí, vistamos el mercado de Surco. Un San Andresito pero donde venden de todo. Un local de pollos, donde los tienen colgados del pescueso, al lado uno de ollas, al lado uno de pescado, al lado uno de frutas, al lado uno de comidas típicas, al lado uno de carne, al lado uno de hilos y lanas. Entonces el olor es una cosa indescriptible. Fuimos ahí, en busca de hilos y materia prima para nuestro negocio. Apesar del olor, fue muy buena la visita al mercado, porque conseguimos varias de las cosas  que estábamos buscando.

Lima nos gustó mucho. Es una ciudad cosmopolita y la industria del turismo está bien desarrollada. El transporte público funciona muy bien, es fácil de utilizar y es barato(nunca como en Ecuador). 

Hace dos días salimos de Lima hacia Ica, una ciudad en el suroccidente del país. Llegamos ahí y nos dirigimos a Huacachina, un oasis en medio del desierto donde nos quedaremos unos días. Ya les contaremos!!

Un abrazo,