Sur de Colombia y Norte de Ecuador

Para nosotros (Ana y Eusebio) es muy importante poder compartir con todos ustedes esta nueva aventura en nuestras vidas. Estamos muy orgullosos de nosotros mismos, y queremos dar gracias a nuestras familias y amigos por acompañarnos de espíritu en este camino. Los llevamos siempre con nosotros.

LA PARTIDA

Lunes 5 de marzo de 2012 a las 11:30 de la mañana sale la flota vía Bogotá-Ipiales. Vamos cargados de ropa, comida, carpa, sleepings, pero sobre todo, vamos cargados de sueños y de unas ganas interminables de conocer territorios y personas únicas. Duramos 24 horas en el bus, recorrimos la mitad de Colombia, pasando por Ibagué, Armenia, Popayán y Pasto, viendo desde Bogotá, como se va transformando el paisaje y su vegetación.

Llegamos el 6 de marzo a Ipiales, que nos recibió con un frío del demonio. Decidimos entonces conocer el famoso Santuario de Las Lajas. Cogimos un colectivo de 3 mil pesos hasta el destino. Comenzamos a descender la montaña asombrados por la energía del lugar. Rodeado de montañas se encuentra el Santuario. Bajando, se ven clavadas en la montaña las placas de agradecimiento que personas y familias dan a la Virgen. Es impresionante. En el interior de la Iglesia, el fondo del altar, es la misma piedra de la montaña. Toda una obra de arte. Se escucha el agua caer desde una cascada muy alta, y abajo el río corriendo como llevando todas las plegarias de los peregrinos. Recorrimos el lugar, bajamos hasta tocar el agua del río y luego casi nos morimos subiendo de nuevo la montaña, pero valió la pena. Luego en el terminal, tomamos un bus que nos dejó justo en la frontera, hicimos los papeles para sacar la tarjeta de la comunidad andina y nos dirigimos a cruzar el puente Rumichaca para ya estar luego en Ecuador. Pasamos por migración, y listo, estábamos en Ecuador!! 

ECUADOR

En la frontera, tomamos un colectivo a 0.75USD hasta Tulcán. Ahí, tomamos una flota hasta OTAVALO. La gente nos recibió muy afectuosamente, cada vez que alguien se sube al bus, saluda. Es increíble. Por cada hora de trayecto en bus por la panamericana, cobran 1USD. Hasta Otavalo son 3 horas, 3 USD. El paisaje es muy lindo, lleno de montañas, acantilados y volcanes. Durante el trayecto, tuvimos 3 retenes: dos de la policía y otro del ejército. Un ecuatoriano nos decía que era normal en esa carretera, no que habría rollo. Total, nos hicieron bajar cada vez por ser extranjeros, nos pidieron los papeles y nos preguntaron qué estábamos haciendo allí. El bus nos dejó en toda la panamericana. Un policía nos indicó donde era el centro de la ciudad y un taxi por 1 USD nos llevó. Ahí mismo encontramos el Hostal LOS ANDES. Un hostal pequeño, cómodo y muy barato. Por un cuarto privado pagamos 12USD la noche.Descargarmos y luego salimos a buscar algo de comida. El hostal quedaba justo al frente de la PLAZA DE LOS PONCHOS, un lugar que en el día es un mercado artesanal donde los indígenas Kechwa de Peguche y Cotavachi llevan sus tejidos para venderlos, y en la noche se convierte en una plaza de comidas típicas: frituras, choclo, papas. 

Al día siguiente, decidimos ir a conocer el LAGO CUICOCHA. Para llegar allá, se debe coger un bus hacia Quiroga por 0.25USD, y allí tomar una camioneta por 4USD hasta el lago. El lago es muy lindo, porque en el medio se encuentran dos montañitas, producto de la erupción del volcán COTACACHI hace millones de años. Recorrimos un poco y luego comenzamos a caminar por el sendero peatonal que da toda la vuelta a la laguna. Era ya tarde y por eso sólo caminamos 1 hora, pero el trayecto completo alrededor son 4 horas. Desde arriba se puede ver el valle de Otavalo con todos sus acantilados y pequeños pueblitos. La laguna nos llenó de energía, el paisaje es hermoso y reconfortante para el espíritu. 

 El jueves 8 de marzo, caminamos un poco por Otavalo, y justo ese día estaban reinaugurando el parque central Bolivar. El parque da vida a la Iglesia San Luis y a la municipalidad de Otavalo. Había un desfile en bicicletas de los niños y las niñas de las escuelas locales, además de los discursos de la representante niña del gobierno estudiantil y del alcalde del municipio. Fue maravilloso estar ahí compartiendo con la gente local ese día tan especial, donde además se veía a cada niño con una rosa en la mano para su madre por ser el día internacional de la mujer. Luego, cogimos un bus hacia IBARRA. Una ciudad más grande como a media hora hacia el norte de Otavalo. Es una ciudad comercial, atravesada por la vía del tren y llena de niños comiendo helado. Ahí visitamos el museo Atahualpa, el baño Inca, el Santuario del señor del Amor, la municipalidad y el antiguo cuartel militar. La ciudad está llena de parques y de gente local vendiendo comida típica en la calle.

Ayer, nos fuimos a conocer la CASCADA DE PEGUCHE. Una reserva ecológica como a 10 minutos de Otavalo. El parque es muy lindo, lleno de vegetación. Subimos la montaña hasta llegar al nacimiento de la cascadas. Ahí, niños se quitaban los zapatos para meterse al agua antes de que cayera por la cascada. El sonido es tan fuerte que no te permite pensar en nada más. Bajamos un poco, y pudimos estar muy cerca del lugar donde cae el agua. Claramente nos pegamos una lavada fantástica, el viento ahí es tan potente que uno siente que lo lleva. La cascada nos fascinó, es muy bonita y su sonido  es revitalizante. De vuelta en Otavalo, tomamos un bus vía la capital. Dos horas de camino y ya estábamos en Quito.

Nos ha encantado Ecuador, su gente muy amable siempre te hablan despacio y con cariño. El clima es cambiante pero ameno. Nos quedaremos unos días en Quito y pronto escribiremos al respecto.

un abrazo