Caminamos Sur América

viernes, 3 de febrero de 2012


Primera vez, primer viaje, primer blog, primer todo.
Eu



Viajar por Sudamérica, a lo mochilero, dejar atrás una vida planeada de principio a fin, en una zona de confort y seguridad que más se parece al miedo que a la libertad.

Despedirme de la fría Bogotá que tanto he querido, que tanto extrañaré, que tantas rabias me ha sacado con sus pitos y trancones, con sus lluvias granizadas, con el frio rompehuesos y el smog asfixiante que duele respirar.

Conocer los caminos y disfrutarlos a cada momento, romper con las fronteras imaginarias que solo alguien que nunca ha salido de su país puede sentir tan reales.
Conocer gente de muchas partes, pasear los mares, los ríos, vivir otras ciudades, saludar al sol desde las montañas, conocer la nieve y el hielo del sur.
Son tantos cambios, tantos sueños…   soy consciente que hasta ahora mi viaje ha sido imaginario, pero a treinta días de partir, el hormigueo en la panza sugiere una emoción que supera a las imaginadas, supone que nunca nada será igual, que muy pronto me conoceré, sabré quién soy en la naturaleza de la humanidad,  de las montañas, de los caminos de Sudamérica.


Estando listo para partir me doy cuenta que las barreras que debí romper para llegar a este punto parecieron siempre insondables, hechas de roca fuerte. Debí tomar decisiones que a los amigos parecieron demenciales, que a la familia han producido preocupación e impotencia, que mis hermanos encuentran valientes y esperanzadoras, y que millones nunca se decidirán a tomar, que sienten la presión en la garganta y quieren gritar, pero que se atragantan con las obligaciones, con los créditos, con el trabajo, con los compromisos, con los miedos y el exceso de necesidades, con el qué dirán.

Quiero que mis hermanos puedan izar sus velas y dirigir el rumbo hacia su propia revolución personal, hacia su propio despertar de esta ensoñación a la que llamamos mundo. Por eso, me propongo recuperar mis sensaciones, mis motivos, los argumentos, las ideas y los consejos. 

4 comentarios:

  1. Más que super,...del putas, que vuestro navegar sea siempre seguro y placentero..

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  2. Así es par de golondrinas con poder para transformarse en cualquier instrumento que ilustre la libertad....
    caminos de enseñanza e intercambio cultural de primera, más allá de la experiencia, es ser partícipe de un sueño hecho realidad, buen viento y buena mar...

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  3. Me parece que es una aventura apenas necesaria, para la vida, para aprender, para valorar la esencia de lo que somos, para encontrar en las dificultades y necesidades no satisfechas el valor real que tenemos como seres humanos en poder abstenernos de cosas y adornos innecesarios y que ocultan nuestra realidad. Los felicito porque tuvieron la valentía de no creer en la mentira más grande del mundo:

    "En un determinado momento de nuestra existencia, perdemos el control de nuestras vidas, y éstas pasan a ser gobernadas por el destino" .

    p.d: Se ven muy bellos en las fotos, tal vez efecto de la felicidad

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  4. Que buena onda, si, ustedes van como seres humanos siempre encuentran seres humanos, y lo mejor prestos a colaborar o asistir, un abrazo y recordar a cada paso los acompañamos en espíritu, agradecemos esta formidable coincidencia

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